A continuación, un editorial que refleja la opinión del gobierno de Estados Unidos:
Estados Unidos ha instituido una nueva política de restricción de visas que se aplicará a los extranjeros responsables de la censura de la libertad de expresión en el país. El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, anunció la iniciativa el 28 de mayo en un comunicado.
“La libertad de expresión es uno de los derechos más preciados que disfrutamos como estadounidenses”, declaró el secretario Rubio.
“Este derecho, consagrado legalmente en nuestra constitución, nos ha distinguido como un ejemplo de libertad en todo el mundo. Incluso mientras tomamos medidas para rechazar la censura en nuestro país, observamos casos preocupantes de gobiernos y funcionarios extranjeros que están asumiendo la responsabilidad”.
“En algunos casos”, señaló el Secretario Rubio, “funcionarios extranjeros han tomado medidas flagrantes de censura contra empresas tecnológicas estadounidenses, así como contra ciudadanos y residentes estadounidenses, sin tener la autoridad para hacerlo”.
El Secretario Rubio advirtió: “Es inaceptable que funcionarios extranjeros emitan o amenacen con emitir órdenes de arresto contra ciudadanos o residentes estadounidenses por publicaciones en redes sociales en plataformas estadounidenses mientras se encuentran físicamente en territorio estadounidense. Es igualmente inaceptable que funcionarios extranjeros exijan que las plataformas tecnológicas estadounidenses adopten políticas globales de moderación de contenido o participen en actividades de censura que excedan su autoridad y afecten a Estados Unidos”.
Esta política de restricción de visas se basa en la ley estadounidense, que autoriza al Secretario de Estado a declarar inadmisible a cualquier extranjero cuya entrada a Estados Unidos “pudiera tener consecuencias potencialmente adversas para la política exterior de Estados Unidos”. Ciertos familiares también podrían estar sujetos a estas restricciones.
“No toleraremos intrusiones en la soberanía estadounidense”, declaró el secretario Rubio, “especialmente cuando dichas intrusiones socavan el ejercicio de nuestro derecho fundamental a la libertad de expresión”.
“Durante demasiado tiempo, los estadounidenses han sido multados, acosados e incluso acusados por autoridades extranjeras por ejercer su derecho a la libertad de expresión”, declaró el secretario Rubio.
“La libertad de expresión es esencial para el estilo de vida estadounidense, un derecho innato sobre el cual los gobiernos extranjeros no tienen ninguna autoridad”.
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